Aquest 2009 es va  celebrar el 25è aniversari del centre d’ensenyament musical més veterà que tenim a Sant Feliu de Llobregat: l’Escola de Música Luisa Saiz, centre vinculat al Conservatori Superior de Música del Liceu de Barcelona. Des del 1984, Luisa Saiz ha introduït diverses generacions en els secrets de la música al seu petit local ubicat a la rambla de la Marquesa de Castellbell. El passat 21 de març la Sala Ibèria de Sant Feliu va acollir la festa d’aniversari d’aquesta escola, una celebració que, com la mateixa Luisa Saiz reconeix, volia ser una jornada en la qual els actuals alumnes de l’escola estableixin lligams d’amistat amb tota la gran família que al llarg d’aquest quart de segle s’ha format al seu centre educati

Fa uns  dies vàreu  celebrar el 25è aniversari de l’escola de música que dirigeixes, però... com van ser els començaments?
La verdad es que en un principio no teníamos previsto abrir una escuela de música... Hace ya 25 años mi hermana, que en paz descanse, y yo estuvimos buscando un local en diferentes poblaciones del Baix Llobregat con la idea de abrir una farmacia. Después de dar muchas vueltas, no encontramos ningún local que se adaptara a lo que estábamos buscando, así que comencé a plantearme otras alternativas. Acababa de terminar la carrera de farmacia, y por aquel entonces ya estaba metida en el mundo de la enseñanza, que me encanta; impartía clases de ciencias naturales y biología a alumnos de BUP y COU. La música también era otra de mis grandes aficiones, de hecho podría decir que es mi vida, y así, sumando la docencia y la música, me planteé la por aquel entonces descabellada idea de abrir una escuela de música. Encontré un local de alquiler en Sant Feliu, el mismo en el que todavía estamos, y al poco tiempo ya estaba abriendo la escuela. Y así hasta hoy...

La teva inquietud pedagògica va ser un element fonamental per obrir una escola de música...
Sí, claro...Creo que una de las mayores virtudes que tiene la enseñanza es que trabajas con uno de los elementos más valiosos de la sociedad: la gente joven. Mis alumnos son como una segunda familia para mí; además de la satisfacción de seguir sus progresos, también te hacen cómplice de su problemática, de su visión del mundo, que evidentemente es muy diferente de la que tenemos las personas adultas. Me siento muy privilegiada por poder dedicarme a aquello que más feliz me hace: la enseñanza de la música, y poder intercambiar experiencias con los alumnos…ellos son los que me dan toda la energía para poder seguir y continuar disfrutando de la alegría de vivir.

Des que es va obrir, deuen ser molts els alumnes que han passat per la teva escola...
Pues sí, en 25 años son muchas las personas que han pasado por aquí, pero desgraciadamente no tengo una relación completa de todas ellas.  Precisamente, éste es uno de los mayores problemas con el que me he encontrado a la hora de organizar la fiesta de aniversario ya que me ha costado mucho esfuerzo poder contactar con todos los alumnos que se han formado en la escuela, pero después del resultado y la asistencia que hubo puedo decir que ha sido un gran éxito. Aprovecho la oportunidad que me ofrece esta entrevista para agradecer a todos los antiguos alumnos, personalidades y ciudadanos que compartieron con nosotros un día tan especial como fue la la fiesta del 25 cumpleaños de la Escuela y que se celebraró el pasado 21 de marzo en la Sala Ibèria de Sant Feliu.

Com va anar la celebració del 25è  aniversari de l'escola?   
Fue un éxito, sobretodo por la participación y la asistencia y del qual me siento especialmente satisfecha. La fiesta comenzó con un concierto, a cargo de los actuales alumnos, estructurado en dos partes: la primera de música clásica, y la segunda, como es habitual en nuestra escuela, dedicada a la música rock. En años anteriores hemos versioneado el musical Grease, Queen, los Beatles, y este año lo hizimos con Elvis Presley. Después del concierto, cena y baile. Previamente todas las personas que querían asistir se pusieron en contacto con nosotros, y la verdad es que la asistencia fue un éxito y me hizo mucha ilusión poder compartir ese día tan especial para mí no sólo con mis actuales alumnos, sino también con los que ahora ya no están conmigo, porque en definitiva, como siempre digo, todos ellos son como una pequeña gran familia para mí.